Por Miguel Diaz de Sandi Uribe, PMP, SCM
Me considero un
creyente de la forma de hacer proyectos tradicionales llamadas en cascada o
Waterfall, mi formación tanto profesional como académica me llevó a creer que ésta
era la única forma de ejecutar proyectos así que, se imaginarán lo reacio a lo
que estaba de los famosos marcos “ágiles”.
Mi primer acercamiento
fue a través de SCRUM que hoy por hoy es el marco de referencia ágil más
conocido en el mercado, la forma fue la tradicional: leí sobre el tema, asistí
a un curso y me certifiqué como SCRUM Master (CSM).
Soy
Ingeniero en sistemas y en mi tiempo libre como muchos me encantaba escribir
código y como todo aquel que alguna vez escribió código no era muy fan de
documentarlo pues la filosofía era “mientras funcione ¿qué más da?”. Conforme me
fui dedicando más a dirigir equipos y menos a escribir código fui descubriendo
la importancia de documentar y me volví exigente con el tema.
Todo esto me llevaba a
creer que SCRUM solo era la forma que habían encontrado los programadores para
justificar el clásico “lo importante es que el código funcione, no cómo lo hice
funcionar, ni su documentación”, y tarde o temprano moriría por su falta de
seriedad en la documentación y su clara dificultad para manejar programas y
portafolios, no parecía listo para los retos de los grandes desarrollos y
soluciones que muchas de las grandes empresas requieren hoy.
Conforme fue pasando
el tiempo fui encontrado cada vez más casos exitosos de ejecución de proyectos
con marcos de referencia Ágil y utilicé algunos éstos,
entonces apareció SAFe®, un marco de referencia serio que ataca el problema con
un equipo de profesionales con años de experiencia en el uso de metodologías ágiles
todo montado en el principio de entregarle valor al cliente, atacándolo de una
forma inteligente y en vez de casarse con un solo marco de referencia extrae lo
que ve útil en otros como Lean y DevOps, los profesionales que te capacitan, no
solo saben de SAFe®, son PMPs certificados y SCRUM Masters y no te dicen que
descartes nada solo que lo intentes a su forma que ya está probada que funciona
por ellos mismos, no te hablan de dejar de documentar, sino de darle más
importancia al software funcionando que a la documentación sin que ésta deje de
tener importancia.
Entonces seguramente se preguntan: ¿qué tipo de metodología es la más recomendable? Pues esto depende de la compañía, el proyecto y de cómo se quiera organizar, puede funcionar cualquiera de estas metodologías.
- Para los proyectos Waterfall es preciso un equipo de proyecto conformado por un jefe de proyecto, quien es el máximo responsable y quien habla con el cliente que solicita la implementación de los servicios.
- En un proyecto Agile existe una comunicación fluida entre el equipo de proyecto y el cliente (product owner) generando un equipo compacto y único.
El modelo de implementación tradicional es la metodología Waterfall, sin embargo hoy en día ya se encuentran implementado la metodología Agile, lo que representa un cambio cultural total en las compañías que requiere implicación de los equipos que la conforman para asumir retos, sean competitivos y sepan trabajar en forma compacta.
Alpha Consultoría a partir del mes de abril de 2018 se ha unido a Scaled Agile como parte de su grupo de Partners con la Categoría Bronce, para poder apoyar a las organizaciones con la implementación de SAFe® a través de servicios de consultoría y de capacitación, con ello no solamente contamos con servicios para contextos ágiles como Scrum, sino también en escalar la agilidad a nivel organizacional.
En caso de requerir más información, por favor contáctanos a info@alpha-consultoria.com
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