Evaluación de Competencias de Directores de Proyectos

Ricardo Toledo, PMP, CSM


INCERTIDUMBRE

Cuando una organización decide embarcarse en la aventura de llevar a cabo un proyecto, siempre se comienza con algo común a todos los proyectos… la incertidumbre. Esta incertidumbre se va despejando poco a poco según avanzan las etapas del ciclo de vida de los proyectos, no siempre con los resultados esperados.

Una de las principales incertidumbres de un proyecto y la que acarrea mayor peso en los resultados, es la selección del Director de Proyecto. Cualquier proyecto, independientemente de sus riesgos o potenciales dificultades puede agravarse o mejorarse dependiendo de las habilidades o “competencias” de la persona a cargo.

De acuerdo a Wikipedia, “… las competencias son las capacidades de poner en operación los diferentes conocimientos, habilidades, pensamientos, carácter y valores de manera integral en las diferentes interacciones que tienen los seres humanos para la vida en el ámbito personal, social y laboral...”

Entendiendo esto, es lógico que queramos para nuestro proyecto a la persona con las mejores y más adecuadas competencias posibles, atendiendo al contexto donde se desarrollará. Por lo tanto, el hecho de poder medir las competencias es una realidad, aunque un buen patrocinador debería poder intuirlas e identificarlas a través de su experiencia con los Directores de Proyecto a su cargo en la organización. Obviamente, los conocimientos de las mejores prácticas en dirección de proyectos y la experiencia aplicándolas, la podemos verificar a través de las certificaciones como la de Project Management Professional (PMP) del PMI®, pero aún esta certificación no garantiza que el Director de Proyectos haya tenido resultados exitosos o que tenga las habilidades gerenciales[1] para llevarlo a cabo.

¿QUÉ COMPETENCIAS?

Pero ¿qué competencias son las que requiere un buen Director de Proyectos? Hay varias que intuitivamente nos vienen a la mente como conocimientos técnicos, liderazgo, trabajo en equipo, organización, etc., de hecho el PMI desarrolló una guía para delinear las competencias que aplican a la mayoría de los Directores de Proyectos, para la mayoría de los proyectos, la mayoría del tiempo. No es un estándar como el PMBOK®, sino un marco conceptual que se describe mejor en inglés con la palabra “framework”, ésta es el Project Manager Competency Development Framewok o en español la Guía de Desarrollo de Competencias para Directores de Proyectos (PMCDF en adelante).
El PMCDF habla de tres dimensiones principales en las cuales están comprendidas las competencias de los Directores de Proyectos, estas son:

1.  Competencia del Conocimiento. Se refiere al dominio de las herramientas técnicas y procesos de la dirección de proyectos y puede ser medida a través de la obtención de certificaciones como la de PMP o equivalentes.

2.  Competencia del Desempeño. Se refiere a los resultados obtenidos a través de las acciones para entregar proyectos, puede ser medida a través de los propios resultados de un proyecto a través de las diez áreas del conocimiento del PMBOK®.

3. Competencias Personales. Se refiere al comportamiento que el Director de Proyectos demuestra a través de su vida profesional, puede ser medida a través de pruebas psicométricas y de comportamiento, a través de evaluaciones de 360° o revisión documental.
Con estas tres dimensiones podemos definir las competencias que posee cada Director de Proyectos y podemos definir la medida mínima necesaria para atender un proyecto específico, esto es, que un proyecto de mayor dificultad requerirá de un mayor nivel de competencias.




Otras competencias deseables en el Director de Proyecto requerido para nuestro proyecto pueden incluirse en la mezcla deseada. Típicamente podríamos incluir competencias técnicas específicas del tipo de proyecto a desarrollar (TI, construcción, manufactura, etc.) que las podemos medir a través de otras certificaciones específicas de la industria o en base a la experiencia en proyectos exitosos similares, y las competencias organizacionales, es decir la capacidad del individuo de manejarse en una organización que presente sus propios retos como en el caso de las instituciones gubernamentales. El PMCDF no establece referencias para otras competencias.


COMPETENCIAS PERSONALES

Las competencias personales que, de acuerdo al PMCDF contribuyen a la capacidad de los Directores de Proyecto para gestionar proyectos son:

  • Comunicación. Intercambio efectivo de información precisa, apropiada y relevante con los interesados del proyecto.
  • Liderazgo. Guía, inspira y motiva a los miembros de su equipo y otros interesados del proyecto para gestionar y superar las problemáticas para alcanzar efectivamente los resultados del proyecto.
  • Administración. Gestiona efectivamente un proyecto a través del uso de recursos humanos, financieros, materiales, intelectuales e intangibles.
  • Habilidades Cognitivas. Aplica con apropiada profundidad la percepción, discernimiento y juicio para dirigir efectivamente un proyecto en un entorno cambiante y evolutivo.
  • Efectividad. Produce los resultados esperados a través de la utilización apropiada de recursos, herramientas y técnicas en todas las actividades de la dirección de proyectos.
  • Profesionalismo. Se somete a un comportamiento ético, gobernado por la responsabilidad, respeto, equidad, y honestidad en la práctica de la dirección de proyectos.
DESARROLLANDO COMPETENCIAS

El hecho de que un Director de Proyecto no cumpla con el total de las competencias requeridas para un proyecto, no significa que hay que descartarlo, ya que siempre es posible desarrollarlas a través de procesos de capacitación, asesoría, mentoreo o entrenamiento sobre la marcha ya sea individual o grupal. Lo ideal es establecer primero una evaluación de partida para detectar las necesidades específicas de los individuos y/o de las organizaciones.
Es importante no subestimar las competencias personales frente a las del conocimiento, desempeño y técnicas, la capacitación específica en dirección de proyectos en fechas recientes está ampliamente difundida en las organizaciones, sin embargo as personales son un poco más difíciles de identificar y desarrollar.
PARA RECORDAR

Las competencias de un Director de Proyectos se desarrollan a través del tiempo, si una organización quiere disminuir la incertidumbre en los resultados de su portafolio de proyectos tiene que poner énfasis en desarrollar a su equipo de trabajo. Si un individuo quiere mejorar su desarrollo profesional como Director de Proyectos, tiene que dedicarle tiempo a su preparación.

Con información del Project Manager Competency Development Framework, Segunda Edición, del PMI®




[1] Las habilidades gerenciales se les conoce hoy en día como “softskills” en inglés cuya traducción un poco literal al español es habilidades suaves, que son aquellas que no son técnicas ni administrativas.

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